4 de febrero de 2015

Hotel Eiffel Rive Gauche de París

Hoy os hablaré del otro hotel en el que estuvimos con @clicfox cuando fuimos a Francia. Esta vez un hotel 3 estrellas con vistas a la Torre Eiffel (a veces cuando se piden las cosas con educación te conceden aquello que pides sin rechistar).
 
Aunque el Hotel Eiffel Rive Gauche tampoco parecía un 3 estrellas como los de España, era coqueto. Bueno, por lo menos daba menos miedo que el Bates Motel de Lognes, estooo..., quiero decir que daba menos miedo que el Hôtel Europarc Marne La Vallée, que me pierde la tecla. Deciros que el Rive Gauche es también uno de los hoteles con sello de Rendez-vous en France. ¡Empezamos! 
 
Cuando nos levantamos el martes por la mañana tomamos el petit déjeuner en el mega Buffet del Bates Motel y nos fuimos pitando a por el bus del polígono de la línea 321 para salir cuanto antes de ahí, no fuera caso que nos encontráramos a Norman en la habitación y nos apuñalara. A eso de las 9 y poco ya estábamos cogiendo el RER A que nos llevaría a disfrutar de la experiencia parisina.
 
Cogimos el metro y bajamos una estación antes de la École Militaire. Hicimos bien porque así pudimos ver la Tour Eiffel al fondo del Champ de Mars y empezamos a hacernos las fotos de rigor (y a empezar a ver cómo llegar al hotel sin perdernos demasiado). Cuando conseguimos llegar al hotel vimos que la atención de la chica de recepción de la mañana era estupenda, y para el nivel de francés que hablo logramos entendernos bien en todo momento. Como hasta las 2 no te daban la llave de la habitación nos permitieron dejar las cosas en conserjería y empezar nuestro turisteo, teníamos poco tiempo en París y muchas cosas por ver así que no había un segundo que perder. 
 
Cuando llegamos a la habitación del Hotel Eiffel Rive Gauche tuvimos una grata sorpresa. Al hacer la reserva de la habitación por Booking podías pedir si tenías alguna preferencia en cuanto a camas y tal y yo, en mi mejor inglés (que como sabéis es regulero), solicité que, si era posible, nos dieran una habitación con vistas a la Torre y ¿sabéis qué?, las teníamos. Por supuesto que no se veía entera pero se veía lo suficiente como para estar contentos con el detalle.
 
Tras comprobar el tema de las vistas, ¡lo miramos TODO! Había un armario empotrado CON puerta y dentro 2 estufas (que creo que no iba ninguna) pero bueno, no pasa nada, el antiguo radiador de pared hacía bien su trabajo. También había dentro del armario un par de almohadas extra (no había colcha extra pero la pedimos en recepción y no tuvimos ningún problema tampoco).
 
Era el momento de ver el baño, la habitación en sí no era tampoco muy grande pero el diminuto baño al menos era un poco más grande que el de Lognes. En París se ve que TODO es pequeño, un poco agobiante para mi gusto.
 
La cama era cómoda, teníamos una mesa y una silla, mesitas de noche en cada lado y enchufes un poco inaccesibles (debajo de las mesitas) para poder recargar las baterías del móvil. En principio, todo estaba bien. A ver, y digo EN PRINCIPIO porque al día siguiente nos dimos cuenta de varios detalles que habíamos pasado por alto con la emoción de haber salido vivos de Lognes. 
 
A lo que iba, el hotel, que aunque pequeño era bonito, tenía los pasillos y escaleras con la madera vista, sin moqueta (si eso era lo que había antes allí). Quedaba un poco feo todo, pero luego vimos el cartel de que estaba en reformas y entendimos el porqué de que estuviera así. El detalle que menos gracia nos hacía hasta entonces era que el ascensor paraba entre plantas y tenías que subir por una insegura escalera de caracol (a una pareja al subir desde el ascensor a la tercera planta se les cayó lo que llevaban en la bandeja, lo que suponíamos que era la cena, y montaron una buena escandalera de cristales rotos). Pero, volvamos al desastrillo que vimos ya tarde en la habitación... 
 
Normalmente, menos en el Bates Motel, todos los hoteles tienen 2 rollos de papel de baño (el normal y el de repuesto), pues el rollo de papel WC de repuesto parecía llevar ahí un par de meses (o incluso, en su lamentable y polvoriento estado, yo diría que 1 añito si me apuras), además a su lado, en el pollete, había un brillantito de la decoración de un anillo o ropa de alguna chica (luego vimos otro igual también en zona de la moqueta de los pies de la cama). ¡Quizás una de las limpiadoras iba perdiendo su brillo a medida que hacía las habitaciones!
 
Incluso, este detalle o el de que los marcos de las puertas (por la parte de abajo) tuvieran imperfecciones por ser un hotel viejo podía ser algo pasable, pero la telaraña de Spiderman que había en la habitación daba un poco de miedo. Ahí, en el techo entre pared y pared había por lo menos 2 palmos de telaraña que no se forman de la noche a la mañana… ¡yo ahora pienso en que suerte que tuvimos de que la araña no estuviera por ahí porque seguro que se nos podría haber comido y nadie se hubiera enterado!


Hotel Eiffel Rive Gauche de París Habitación Hotel Eiffel Rive Gauche de París Armario Empotrado CON puerta Armario Abierto con la calefacción Baño del Hotel Ducha del Hotel Desperfectos del Hotel Papel WC con Ponderosa Telaraña de Spiderman en el Hotel Rive Gauche Vistas de Día del Hotel Eiffel Rive Gauche de París Vistas de Noche del Hotel Eiffel Rive Gauche de París
SLIDER: Hotel Eiffel Rive Gauche de París
 
Otra cosa, que por un lado me sorprendió pero por otro me hizo recordar a lo que se hacía antiguamente en los hoteles es que cuando salías del hotel tenías que dejar la llave de la habitación en recepción y pedirla al volver; por un lado te ahorras preocuparte de que si se pierde a ver qué pasa pero por otro piensas: ¿y por qué tengo que dejar mis cosas a su disposición? En cualquier caso, nosotros la dejábamos y recogíamos en cada salida y entrada del Hotel Eiffel Rive Gauche. Recuerdo que un día al volver, o al bajar a recepción a por algo, unos guiris se estaban llevando una buena bronca de la recepcionista borde del turno de tarde; además, creo que fueron los mismos a los que luego les cayó otro buen broncón por ponerse a fumar en la habitación.   
 
Por todo lo demás, en general, el hotel estaba bastante bien; no sé si digo eso porque veníamos de Lognes demasiado asustados. Los precios, bueno, por ser París, distrito 7 y estar cerquísima de la Torre Eiffel creo que encontramos lo más barato y bien que había en el lugar. Para haceros una idea cada noche que estuvimos, en las fechas que fuimos, nos salió por 97€ (impuestos de turismo aparte) y sin desayuno. Del tema de “la comida” y sus fórmulas ya os hablaré en otro post.

Y vosotros chiquis, ¿habéis estado en algún hotelito últimamente?, ¿qué cosas hubierais mejorado y cuáles os encantaron? Espero vuestros comentarios en mi postito. À Bientôt!

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